# Derroteros: Rebecca Solnit, el camino inesperado (CARNE CRUDA EXTRA) > [!noteinfo] [Derroteros](https://spoti.fi/3VrfZrG) · 27.06.2025 · Source: [Derroteros: Rebecca Solnit, el camino inesperado (CARNE CRUDA EXTRA)](https://open.spotify.com/episode/0moSCpeKlZ32ECPe9aKeuU?go=1&sp_cid=bdb8ff616bb02be40c1c9db33c3e4a2e&utm_source=embed_player_p&utm_medium=desktop&nd=1&dlsi=1b13de3974134eba&flow_ctx=52c760ef-908a-4798-9a86-5556d8e4ea1f%3A1754760228) · Saved on: 09.08.2025 · #clippings #podcasts > [!tldr]+ > El episodio del pódcast "Derroteros: Rebecca Solnit, el camino inesperado" de Carne Cruda Podcast presenta a la autora Rebeca Solnit, quien discute su obra y su último ensayo. El episodio explora la idea de que el destino no está predefinido y destaca su contribución a la discusión cultural y social. > > - Cita bibliográfica: Carne Cruda Podcast. "_Derroteros: Rebecca Solnit, el camino inesperado (CARNE CRUDA EXTRA)_". Spotify, 27 de junio de 2025. https://open.spotify.com/episode/0moSCpeKlZ32ECPe9aKeuU.. Consultada el 09.08.2025. > - Cita en línea: (Carne Cruda Podcast 2025) > > #AI-generated ![](https://i.scdn.co/image/ab67656300005f1fcd6827cc73d6f0f4b10b53c9) Episodio de pódcast [Carne Cruda Podcast](https://open.spotify.com/show/56JLkQ1ijviWl0zsPQ6WJr) 27 jun · Tiempo restante: 37 min 53 s ## Descripción del episodio En nuestro último Derroteros de la temporada, nos vamos de paseo con la gran Rebeca Solnit. La autora de "[[../../Lecturas/Bibliografía/Wanderlust. Una historia del caminar|Wanderlust, una historia del caminar]]", que popularizó el término mansplaining en el mundo con su libro "Los hombres me explican cosas". Un recorrido por su obra y por "El camino inesperado", su último ensayo en el que cuenta que debemos esperar lo insólito porque el destino no está escrito como han demostrado todos los rebeldes y revolucionarios saliéndose del camino marcado. Escucha todos los Derroteros aquí: https://spoti.fi/3VrfZrG Haz posible Carne Cruda con tu donación aquí: http://www.carnecruda.es/hazte\_productor/ ## Sobre el caminar #walking **Rebecca Solnit** La gente tiene miedo de utilizar la palabra genocidio en Estados Unidos. Por ejemplo, las personas que han protestado, los activistas, sí, que lo utilizan. Los periódicos mainstream hablaban mucho de cómo mataban a civiles en regiones rodeadas de murallas, de armas, de una forma de autodefensa, pero realmente Israel está destruyendo su propio futuro, está poniendo en jaque la seguridad de los judíos, porque claro, al final todo el mundo piensa que todos los judíos están apoyando el régimen de Netanyahu. Hay una forma convencional en la que hablamos de las historias que tienen dos lados, esta guerra está destruyendo Palestina y también Israel, está destruyendo la seguridad de los palestinos y de los israelíes. Y el llamarlo guerra es decir que hay dos partes luchando cuando en realidad Palestina ha estado durante casi dos años recibiendo violencia contra sus civiles de manera imparable. Israel solamente un día. El número de muertos es enorme. Bueno, no se me van muy bien las mates. Miles, ¿no? 35.000 con respecto a 1.200. Muchos más. Así que, sí, y cada crisis es una parte como la historia de la que se cuenta de las crisis, y hay muchas historias que se encuentran en torno a las crisis a día de hoy entre Palestina e Israel. **Santiago Alba Rico** Después de este desvío por la política vamos a volver a los libros en el deambular. En el pasado, la cartografía, podríamos llamarlo de Rebecca Solnit, hay varios libros especialmente imprescindibles. El primero, uno que a mí me marcó especialmente, es [[../../Lecturas/Bibliografía/Wanderlust. Una historia del caminar|Wanderlust, una historia del caminar]], donde trazas una historia cultural del caminar con experiencias personales y un análisis de cuerpo, espacio público y género. ¿Por qué el acto de caminar es un gesto poético, filosófico y político tan central en tu obra? **Rebecca Solnit** Escribí este libro en el año 2000 porque vi cuánto las personas se salían de los espacios públicos y no querían pasear, perderse. Y esto fue incluso antes de los móviles. Ahora todos los días miramos a ese estúpido móvil a ver qué nos dice o qué hacemos cada día. Creo que era una forma de arrodillarse frente a las leyes del mundo en el que vivimos, asumir este proceso de descubrimiento y encuentro para tantos escritores, incluso para mí. Ha sido tan importante en nuestro trabajo. El [[../../Themarium/Caminar/Caminar|caminar]]. [[../../Themarium/Caminar/Caminar|Caminar]] es un método de transporte que todos lo llevamos incluido. Estamos equipados con ello. Todo el mundo que tiene un [[../../Fragmentarium/Cuerpo|cuerpo]] y que sea libre puede hacerlo. Y hay muchas formas distintas en ello. A veces se narra en primera persona, pero luego vuelvo a la historia de la evolución, de cómo se empezó a [[../../Themarium/Caminar/Caminar|caminar]], desde que íbamos a cuatro patas hasta dos patas. y luego el género, la política de género, como has dicho, o el desarrollo de la pasión por la naturaleza, que es, por ejemplo, hacer senderismo, caminar por el campo, que está muy conectado con ese nacimiento de la conciencia y el activismo medioambiental en mi vida. Y tal vez el caminar en pareja, o por ejemplo los hombres gays que hacían cruising, antes de tener Grindr y otras aplicaciones, que era lo que había que hacer, lo cual me parece tal vez un poco triste. Y también la revolución, porque cuando empecé a escribir ese libro, siempre pensaba que escribir era algo maravilloso, gente haciendo senderismo en el campo. Pero, por ejemplo, en la Revolución Francesa se empieza no solamente con el ataque a la Bastilla, pero con esta marcha de las mujeres a los plazos de Versalles para intentar traer al rey y a la reina de vuelta y hacer los prisioneros de las personas. O sea, el caminar es una fuerza política muy importante a medida que los protestantes caminan, hacen manifestaciones. O sea, quería celebrar y también llevar la atención a esto en un momento en el que se veía casi amenazada esta actividad. No caminamos de manera libre en las ciudades, Así no puedes diseñar la posibilidad de la revolución. Tenemos espacios súper privatizados. Hay personas a las que se les da la idea de que sus cuerpos no son los apropiados para moverse de un sitio. Hay gente que me dice, esto está súper lejos de ir caminando, no solo son cuatro kilómetros. Yo muchas veces a la gente le digo, oye, 10 kilómetros es algo totalmente abordable, puedes caminarnos. Hay un libro de John Muir que se llama Un camino de mil kilómetros. que es un camino hacia el Golfo de México. Hay otras historias de caminos largos. O sea, lo que quería hacer es darnos un poco ese poder de vuelta a nuestro cuerpo, de estar en el mundo, de descubrirnos a nosotros mismos, descubrir nuestro propio poder, sea un poder espiritual o el poder literario de la imaginación que podemos descubrir mientras caminamos o el poder de las personas reuniéndose en las protestas. **Santiago Alba Rico** Sí, no hay nada como poner los pies. **Rebecca Solnit** Una respuesta larga. **Santiago Alba Rico** No hay nada como poner los pies en la tierra y de hecho pienso que los que se transportan casi siempre en esas limusinas tintadas o viven en pisos altos, el problema que tienen para entender a la humanidad es que no pisan el suelo. Como bien decía, utiliza capítulos de la historia universal y colectiva que riman en el libro con su historia personal. ¿Qué es lo que le ha enseñado a ella caminar? **Rebecca Solnit** Yo crecí en una era en la que los niños Estaban como de manera libre, como se dice en las gallinas, ¿no? Las gallinas camperas, pues eran niños camperos. Podían pasear por donde quisieran. Yo crecí en una zona que era mágica porque podía caminar hacia la biblioteca a 15 minutos de mi casa. Luego hacia el norte había granjas, había caballos, había encinas, había campos, había colinas, había riachuelos en los que podíamos jugar. Entonces, mis pies me llevaban a todas partes, tenía una bicicleta que no la utilizaba muchísimo y crecí en la manera en la que yo creo que los niños han crecido hasta la era en la que nos convencieron de que el mundo era tan peligroso que había que llevarlos en coche a todos lados o dejarlos en frente de la tele. Y creo que nos genera confianza y exploración, el sentido de que podemos navegar, que podemos explorar, que las personas que utilizan los teléfonos no tienen, ¿no? Siempre tenemos los mapas que seguimos, pero hay que celebrar esa exploración de las ciudades. Y cuando llegó las elecciones de 2016, ahí empecé a pensar, qué momento político tan terrible estamos. Y ahí escribí una carta a Donald Trump que publiqué diciendo, Donald Trump debería visitar Nueva York porque ha estado viviendo en Nueva York todo el rato, pero se movía en limusinas, en jets privados, en edificios superaltos. Pero si vas a Nueva York, si coges el metro, si vas a esos barrios más étnicos, descubres que todas las cosas que dice la derecha son horribles y que no deberían pasar. En realidad ya han pasado, ¿no? Porque Nueva York es una ciudad enorme que ha estado resurgiendo, que ha crecido, Se hablan cientos de idiomas. Creo que tenemos más de 7.000 agentes de policía musulmanes. Hay muchísimas personas también sin papeles, muchos migrantes. Hay personas que no son blancas. La idea de que los inmigrantes, los gays, los musulmanes, la diversidad es una amenaza. A ver, es una ciudad que lo tiene desde hace mucho. en abundancia, en su gloria, y además está mejorando. O sea, es un poco como desacreditar toda la agenda de derechas. Siempre se dice que, de hecho, si faltas a esta gente, la ciudad colapsaría. **Santiago Alba Rico** En muchos de tus libros, como en "[[../../Lecturas/Bibliografía/Wanderlust. Una historia del caminar|Wanderlust]]" o tu memoir "Recuerdos de mi inexistencia", el cuerpo de la mujer aparece como territorio político. ¿Cómo lo vives tú como escritora y como caminante? **Rebecca Solnit** Una de las alegrías de crecer es que ya no me acusan sexualmente, pero es algo que le sigue pasando a las mujeres jóvenes. Es como no es tu mundo, no estás segura. Y los hombres tienen el derecho de acosarlas, incluso violarlas o incluso asesinarlas. Y es algo que a día de hoy pasa, que la mayoría de las mujeres tienen ya metido en su cabeza de manera consciente o inconsciente en cuanto a cómo se mueven en el mundo. Yo como feminista me crié en una casa que tenía mucha violencia masculina. Me mudé, salí, fui primero a vivir en París, en San Francisco. Yo sufrí acoso por parte de hombres en la calle. Y no, cuando te dicen de pequeño, no, que en casa, por ejemplo, estás seguro. Yo también vivía como esa agresión, luego la vivía desde la calle, luego en trabajos que tenía. Y nadie pensaba que esto requiriese una revolución de los derechos humanos. Yo soy feminista a día de hoy, en ese momento tal vez no estaba tan conectada con ello. Y se pensaba que en ese momento las mujeres tenían que renunciar a su libertad, tipo no vayas aquí, no viajes sola, no salgas a esta hora, no cojas este trabajo, no conduzcas taxis. Las mujeres se supone que solamente tienen como que reducir su espacio y tal, sus propias vidas a cada vez menos. Hay una cosa que mencionó en el libro [[../../Lecturas/Bibliografía/Wanderlust. Una historia del caminar|Wanderlust]] en Beckley, en el campus de California con algunas mujeres en los años 80, después de que hubo ciertas violaciones y se pusieron una serie de carteles que decían, ningún hombre debería salir a la calle cuando sea de noche. Entonces es como darle un poco la vuelta a la historia. La [[../../Libellus/_versiculi/Libertad|libertad]] es como que se le tiene que controlar, se tiene que sacar de las personas, pero a ver, sigue pasando el día de hoy. Las mujeres a veces tienen que rechazar su libertad y creo que las mujeres tienen que hacer lo que saben que les va a ayudar a estar más seguras, pero necesitamos una revolución que solamente se complete cuando los hombres ya no piensen que tienen el derecho a violar a las mujeres, a quitarle su autonomía corporal cuando ya no se sientan que la masculinidad es algo que se gana y no algo que se le agrada a través de esta violencia a través de este acoso esta agresión, etc. o sea, esto fue un poco la formación de feminismo y después en estas memorias de lo que digo lo que yo siempre he estado hablando y dialogando especialmente sobre el género es que este mundo es una democracia de voces y la violencia siempre ha sido violencia contra la voz, la voz que dice sí, la voz que dice no, la voz que testifica, esto es lo que me ha pasado, esto es lo que creo, estas son las consecuencias, la voz que grita, que entra en los espacios judiciales. El mundo hace no mucho no permitía a las personas de color, a las personas negras, a las mujeres, a participar en un montón de espacios. No se creía las mujeres cuando contaban sus historias, o se las culpaba porque decían que su marido las había enviado. **Santiago Alba Rico** Entonces, la democracia de voces creo que es algo muy importante para mí. Hablando de feminismo, en El Camino Inesperado constatas que el feminismo acaba de empezar y eso tenemos que tenerlo muy en cuenta. ¿Deberíamos ser más conscientes de que los cambios realmente radicales llevan el ritmo lento del caminar? **Rebecca Solnit** Y crees, si piensas en lo antiguo que es el patriarcado, creo que si miramos atrás, lleva más de 2.000 años ahí, el hecho de que haya cambiado las relaciones de género y el estatus de las mujeres en la cultura, en la ley, en la representación pública, todo lo que ha cambiado en 60 años no es lento. Pero es verdad que hay que volver al mundo antes de esta ola de feminismo, a principios de los años 60 para entender cuánto ha cambiado. Y esto es otra situación que creo que a la larga nos ayuda a sentir poderosas, exitosas, que reconoce que el cambio ha sido enorme y que de hecho el feminismo ha sido un proyecto muy exitoso, por supuesto lejos de estar completado todavía, pero creo que si puedes viajar al año 60 y le puedes explicar cómo el mundo es a día de hoy en cuanto a igualdad, la participación de las mujeres en los espacios públicos, profesionales, políticos y las leyes que han cambiado, el matrimonio que ha cambiado, cómo se entiende el matrimonio, cómo se entiende el consentimiento. Pues creo que, bueno, hay mujeres que son primeras ministras, presidentas, creo que en algunos países se ha conseguido una mayoría femenina en el Parlamento, creo que sería algo totalmente incomprensible para las personas de ese año, de esa época. Incluso puedes ver mujeres participando en la baton de Boston, y en los años 60 era una transgresión brutal, se supone que no se podía hacer, las mujeres eran frágiles, débiles, incluso para correr una maratón. Las mujeres que lo hacían, bueno, de hecho, una de ellas fue atacada físicamente. Así que sí, hemos cambiado mucho el mundo y tenemos mucho más que hacer. Y eso es algo que creo que de una manera muy importante, la gente dice, bueno, esto solo son historias, algo ha tenido mucho éxito, pero no ha terminado. Estamos en medio de la historia y es difícil para las personas entender que, vale, ok, hemos conseguido todo, hemos terminado, o no hemos conseguido nada, y ya está, porque no hemos conseguido absolutamente nada, o luego hay gente que sé que celebra victorias y piensan que es una manera de decir, vale, hemos terminado. Pero creo que el celebrar victorias a medio camino, el reconocer, es un pasito en el camino que ayuda a las personas a seguir. Yo soy mucho más alegre que muchas de las personas de izquierdas. **Santiago Alba Rico** Sí, es verdad que hay que recordar que esto es un camino y que cada una de las etapas que traen victorias son una esperanza para seguir caminando. Me ha interesado mucho esa reivindicación que hace desde el feminismo de la cultura de las tías, me refiero al parentesco, incluso habla de un concepto de antifascista, como las tías antifascistas, que se puede aprender de ese personaje, de ese papel que pueden jugar en la cultura feminista de cooperación, de apoyo mutuo.